No tengo que escuchar la voz
para que me llegue el frío.
Ni entender la letra
para convertirme en otoño.
Casi todo
lo que se ve desde mi ventana
son árboles que tiritan.
Casi todo
lo que se siente bajo mi garganta
son hojas que caen.
------
Este poema llevaba un tiempo en alguna balda de mi memoria, así como intuído pero sin escribir. Y aquí está, como usualmente un borrador rapidito antes de que se me olvide. El poema le debe el título y notables cosas más a esta canción que tanto me gusta de mis amigos de la barca de sua.
5 comentarios:
Di que sí, que esta canción también me remueve a mí cosas.
Bonito todo.
kaila
y eso que teníamos mogollón de ganas de venir... es que sin abrazos y besos no se puede vivir :) te achuchaba pero ya! preciosa! :)
:D
Ains a ver si hacemos otra reu/fiesta/encuentro lo que sea!!
Besos a las dos!
Jo, Ecnil, llevas un ritmazo de actualizaciones que cuando se me ocurre algo para firmar ya has publicado dos o tres posts más...
¡Pero esta vez no me pasa! ¡Aunque sea escribiendo una chorradita como esta! ¡Jum!
:)
Todas las chorradas son bienvenidas Cefe!! Y no me puedo creer que necesites tiempo para pensartelas! ;)
Publicar un comentario