Favoritos

Últimamente pienso mucho sobre favoritos, y me doy cuenta de que eso siempre ha sido un problema para mi indecisa y fantasiosa naturaleza.
Me explico, el motivo de que escriba hoy sobre favoritos es un juego chorra que hago por las redes, eligiendo una canción cada día con alguna que otra directriz. Y si bien en casi todos los casos se me ocurren muchas canciones que encajan en la descripción, cuando el reto es superlativo encuentro escollos que sólo salvo con alguna que otra trampilla mental. Y es que cuando se trata de "mi canción favorita" igual que cuando me preguntaron quien era "mi poeta favorito" me quedo en blanco.


Ese favorito romántico que es como una tabla de salvación, que podrías leer o escuchar siempre, y que con total seguridad brilla por encima de todo lo demás en la escala de tus gustos... Cuando intento evocar algo que despierte esa sensación en mí, visualizo una sombra a contra luz entre la bruma. ¡No conozco a mi poeta favorito, ni a mi grupo, ni a mi álbum favorito, ni...! Es como si sintiera que aún hay álbumes, poetas, libros, que pueden desbancar todos los que conozco de un plumazo... Pero da igual, leo, escucho, escribo y aunque hay algunos que suben con merecido esfuerzo al podio de los grandes, ninguno puede ocupar el lugar brumoso e idealizado del favorito de verdad. Ahora se me quita un poco el pánico, y me sonrío segura de que sabría dar una lista de poemas que quise escribir, o canciones que querría haber cantado. Sin la dichosa primera estrella, pero con todo el brillo de lo maravilloso y encantado.


Muy pequeña, nunca repetía el sabor del helado que tomábamos en la playa después del paseo de por la noche, primos y tíos juntos. Todo el mundo variaba entre dos o tres, yo siempre elegía dos gustos distintos cada noche, quería probarlos todos. ¿Como puedes saber que ese te gusta más que los demás si no los probaste? Descubrí que el de menta no me gusta nada, y que los de frutas sólo en sitios donde las frutas son de verdad. Pero no dí con "mi helado favorito". En el helado sin embargo he hecho progresos mucho mayores que en la música y la literatura, en cuanto a estudios y favoritos. Pero eso ya, es otra historia...